lunes, 8 de noviembre de 2010

001- La Biblia, su origen, historia y lugar en el mundo


LA BIBLIA es un libro extraordinario. Es EL LIBRO por excelencia, como lo consideraba el célebre escritor Walter Scott (1771-1832), quien afirmó en su lecho de muerte: "No hay más que un libro", refiriéndose a las Sagradas Escrituras. Su origen, su historia, su contenido y su influencia en la vida de los individuos y de los pueblos que lo han leído con actitud receptiva, no conocen nada semejante.
La Biblia contiene en sí misma pruebas de su origen divino. Ningún otro libro puede contestar las preguntas de la mente o satisfacer los anhelos del corazón corno lo hace la Biblia. Se adapta a todas las edades y condiciones de la vida, y está llena del conocimiento que ilumina la mente y santifica el alma.
En la Biblia tenemos una revelación del Dios viviente. Si se la recibe con fe, tiene poder para transformar la vida. Durante toda su historia una mano divina la ha cuidado y preservado para el mundo.

COMO, CUANDO Y POR QUE FUE ESCRITA
Siglos después del diluvio, cuando los hombres se multiplicaron y las tinieblas se asentaron de nuevo sobre el mundo, hombres santos escribieron movidos por el Espíritu de Dios. Así Dios habló a su pueblo, y por medio de él al mundo, para que el conocimiento de Dios y de su voluntad no se desvaneciera de la tierra.
Durante centurias esta obra prosiguió, hasta que vino Cristo, la Simiente prometida. Con él, y el bendito mensaje de luz y salvación proclamado por él y por sus apóstoles, finalizó el registro de las Escrituras, y se competó la Palabra de Dios.


ESCRITOS ORIGINALES Y TRADUCCIONES
La mayor parte del Antiguo Testamento fue escrita originalmente en hebreo, en rollos de pergamino, lienzo o papiro. Estos fueron más tarde traducidos al griego. La traducción más antigua, se conoce como la Septuaginta, o Versión de los Setenta, hecha en Alejandría para la famosa biblioteca de esa ciudad. La traducción fue comenzada bajo el patrocinio de Tolomeo Filadelfo, alrededor del año 285 AC. Se dice que la orden original de esta traducción fue dada por Alejandro Magno, quien se había enterado previamente, al visitar Jerusalén en 332 AC, de la profecía de Daniel de que Grecia vencería al reino persa. (Véase Josefo, Antigüedades judaicas, libro II, cap. 8, par. 5.) Esta era la versión de uso corriente en el tiempo de Cristo.
Los eruditos consideran que el Nuevo Testamento fue escrito originalmente en griego (aunque algunos piensan que San Mateo fue escrito primero en hebreo, y traducido más tarde al griego).
En una fecha temprana distintos individuos tradujeron al latín la Septuaginta y el Nuevo Testamento que existía en griego. Una versión de toda la Biblia preparada más cuidadosamente, la Vulgata de Jerónimo, fue hecha de 383 a 405 DC. Se la llamó Vulgata, o versión "común", porque era de uso corriente entre la gente que hablaba el latín.

LA BIBLIA EN IDIOMAS NACIONALES
Hasta entonces, sin embargo, la Biiblia había sido en alto grado impresa solamente en un idioma antiguo, que el pueblo común no comprendía, y sin la Palabra de Dios en sus manos, la buena semilla sembrada entre ellos era fácilmente destruida. "¡Oh --decían os defensores de sus puras enseñanzas-, si sólo pudiera el pueblo tener la Palabra de Dios en su propio idioma, eso no sucedería! Sin ello será imposible establecer a los legos en la verdad".
¿Y por qué no la tendrían ellos en su propia lengua?, razonaban. Moisés escribió en la lengua del pueblo de sus días; los profetas hablaban en la lengua familiar de los hombres a quienes se dirigían; y el Nuevo Testamento fue escrito en el idioma entonces corriente en el mundo romano.
La traducción de la Biblia al inglés por Juan Wiclef y sus asociados, alrededor de 1380, fue uno de los principales hechos rectores de la Reforma. Preparó también el camino para el reavivamiento del cristianismo en Inglaterra, y para la multiplicación posterior de la Palabra por millones para todo el mundo.
El hacer esa traducción en aquel tiempo, dice Neander, "requería un espíritu valiente que ningún peligro pudiera aterrar". Por hacer esto, 'Wiclef fue atacado desde varias partes, porque, se protestaba, "él había introducido entre la multitud un libro reservado exclusivamente para el uso de los sacerdotes". En la acusación general se declaró que "así el Evangelio había sido expuesto por él a los laicos, y a las mujeres que pudieran leer, más abiertamente de lo que anteriormente lo había sido a los clérigos más cultos, por lo que la perla de¡ Evangelio se arrojaba al público y era hollada por los puercos". En el prefacio de su traducción, Wiclef exhortaba a la gente a leer las Escrituras.
Un sentido de temor reverente y un estremecimiento de gozo llenó el corazón de Lutero, el reformador alemán, cuando, a la edad de veinte años, mientras examinaba los volúmenes de la biblioteca de la Universidad de Erfurt, sostuvo en sus manos, por primera vez en su vida, un ejemplar completo de la Biblia. "Oh, Dios -exclamó-, si yo pudiera tener uno de estos libros, no pediría otro tesoro". Un poquito más tarde él halló en un convento una Biblia encadenada. Y a ella recurrió constantemente.
Pero todas estas Biblias, como las de cualquier otro lugar, excepto la inglesa, estaban en un idioma antiguo, y podían ser leídas solamente por la gente instruida. ¿Por qué, pensó Lutero, tiene que estar la Palabra viviente confinada a las lenguas muertas? Como 'Wiclef, por lo tanto, él decidió dar a sus compatriotas la Biblia en el idioma popular; y lo hizo: el Nuevo Testamento en 1522, y la Biblia completa, la obra cumbre de su vida, en 1534.
Impresionado con la idea de que el pueblo debía leer las Escrituras en su lengua materna, William Tyndale, de igual manera, en 1525 dio a la gente de habla inglesa su traducción del Nuevo Testamento, que sirvió de base para la famosa traducción llamada del Rey Jacobo, y más tarde tradujo algunas porciones del Antiguo Testamento. Su ardiente deseo de que ellos pudieran conocer la Biblia fue bien expresado en la declaración de que, si Dios le concedía la vida, él haría que los muchachos que manejaban el arado conocieran más las Escrituras de lo que la conocían comúnmente los teólogos de sus días.
La primera Biblia completa en inglés fue la de Miles Converdale, impresa en Zurich, Suiza, en 1535. A ella siguieron otras versiones, entre las cuales puede mencionarse la Gran Biblia, preparada por sugerencia de Tomás Cromwell, Conde de Essex.
Es evidente que en España ya en 1233 circulaban traducciones parciales o completas de la Biblia en el idioma del pueblo; de lo contrario no se habría promulgado el decreto de Jaime de Aragón, que prohibía su lectura.
En 1280 se terminó la traducción manuscrita de la Biblia Alfonsina en romance, transición entre el latín y el castellano, por orden de¡ rey Alfonso el Sabio. La primera versión completa de¡ Antiguo Testamento en español se conoce como La Biblia de la Casa de Alba. Vio la luz en 1430, escrita a mano. Pero no circuló, porque la Inquisición se apoderó de ella, aunque no la destruyó.
La primera versión completa del Nuevo Testamento impresa en español, conocida como El Nuevo Testamento de Enzinas, terminó de imprimirse en 1542 en Amberes. Y la Biblia de Ferrara, la primera versión en español del Antiguo Testamento, se publicó en 1553.
Los primeros ejemplares de la Biblia completa en castellano aparecieron en 1569 en Basilea, Suiza. Su traducción fue obra de Casiodoro de Reina. Revisada cuidadosamente por el brillante escritor Cipriano de Valera, fue impresa en 1602 en Amsterdam.
Así la luz de la verdad comenzó a brillar una vez más en el Mundo Occidental, pero no sin oposición.
Dos siglos más tarde, de 1790 a 1793, se imprimió por primera vez en España misma una versión de la Biblia en castellano, la del padre Felipe Scío de San Miguel, en diez volúmenes. Ahora existen muchas otras, tanto católicas como protestantes, algunas de ellas muy buenas.

LA QUEMA DE BIBLIAS
Como Joacim, rey de Judá, y los príncipes existentes bajo el reinado de Sedequías, mostraron su menosprecio por Dios quemando los escritos de Jeremías y arrojando al profeta en una cisterna (Jeremías 36:20-23; 38), así los hombres trataron de contener la marea naciente de la Reforma quemando la Biblia y a sus trazductores.
La quema de la Biblia fue iniciada en Inglaterra con la destrucción de los ejemplares de la edición de Antwep del Nuevo Testamento de Tyndale, en Paul's Cross, Londres, en 1527; y fue seguida por la quema de la segunda edición en 1530. Y algo más tarde, los escritos y traducciones de Wiclef, Tyndale, Basil, Barnes, Coverdale, y otros, puero proscritos y en algunos casos quemados.
Cuarenta y tres años después de la muerte de Wiclef, o sea en 1428 DC., por oden del Concilio deConstanza, los huesos de ese reformador fueron exhurnados y quemados. El 6 de octubre de 1536, por orden de Carlos V de Alemania, Tyndale fue estrangulado y quemado en la hoguera en Vilvorde, cerca de Bruselas. "Si Lutero no se retractare -escribió Enrique VIII en Inglaterra-, entrégueselo a él y sus escritos a las llamas".
Tal fue, bajo la tiranía espiritual que imperaba en aquellos tiempos, la suerte de muchos que se colocaron de parte de Dios y de su Palabra.

LA PALABRA NO ESTA PRESA
Pero la Palabra de Dios no podía quedar aprisionada para siempre. Al tratar de impedir su circulación, los hombres descubrieron pronto que estaban intentando lo imposible.
La Biblia había echado profundas raíces en los corazones de la gente. Lo que reyes y prelados habían tratado de suprimir y destruir, reyes y prelados comenzaban ahora a fomentar y suministrar.
En su Stories From Englisk History (Anécdotas de la historia inglesa), páginas 196, 197, Henry P. Warren dice- "Henry, por consejo de Crornwell, ordenó que se tradujera la Biblia al inglés, y que se colocase un ejemplar en cada iglesia. Se habían hecho traducciones al inglés antes, pero no habían estado generalmente en manos del pueblo, y habían sido leídas solamente en secreto y con temor... Cromwell pidió entonces que Cranmer y los obispos revisaran la Biblia, y que la publicaran sin notas ni comentarios; y en 1539 se encadenó un ejemplar de la Biblia en inglés a la mesa de lectura de cada iglesia parroquial. Desde entonces la Biblia nunca ha dejado de ser impresa y vendida libremente".
Dice Carlos C. Coffin, en su Story of Liberty (Historia de la Libertad), capítulo 2, página 44: "El pueblo escucha la lectura con asombro y deleite. Los hombres empiezan a pensar; y cuando lo hacen, caminan hacia la libertad. Ven que la Biblia les da derechos que hasta entonces se les habían negado: el derecho de leer, de adquirir conocimientos. Se abren escuelas. Hombres y mujeres que hasta ese momento no conocían ni una letra del alfabeto, aprenden a leer. Los hijos enseñan a sus padres. Es el comienzo de una nueva vida, un nuevo orden de cosas en la comunidad; el comienzo de la libertad".

LA BIBLIA ATODO EL MUNDO
Finalmente, fueron organizadas grandes sociedades bíblicas en Inglaterra, en Norteamérica, y en otros países de Europa, con el propósito de dar la Biblia al mundo, a cada "nación, tribu, lengua y pueblo" en su propio idioma. Las principales son la Sociedad Bíblica Británica y Extranjera, fundada en 1804, y la Sociedad Bíblica Americana, fundada en 1816. Estas y otras organizaciones semejantes han esparcido literalmente cientos de millones de ejemplares de la Biblia en un gran número de idiomas. La Iglesia Católica también está participando activamente en esta noble obra, en forma especialmente notable desde el Concilio Vaticano II..
Así se está proporcionando al mundo la Palabra de Dios, en preparación para proclamar a toda la humanidad el último mensaje evangélico, la conclusión del reinado del pecado, y el advenimiento del Señor en gloria. "Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin" (S. Mateo 24: 14).

sábado, 6 de noviembre de 2010

2. Regresando a Jerusalén
La historia
Lucas 24:13-35
Los discípulos de Jesús estaban totalmente abatidos. Todas sus sueños y esperanzas del nuevo reino de
Dios habían sido clavados en una cruz el viernes anterior. Tambaleando con su congoja y confusión, Cleofas y su
compañero descendieron lentamente recorriendo el viaje de once kilómetros de Jerusalén a su hogar en el
pequeño pueblo de Emaús. Mientras el sol se ocultaba aquel domingo por la tarde y ellos recorrían el áspero
camino, un extraño se les acercó para caminar con ellos. Poco sabían ellos que este nuevo compañero de viaje
era el mismo Señor resucitado.
Prestando poca atención a este compañero de peregrinaje, los dos desanimados discípulos comenzaron a
repasar los asombrosos eventos ocurridos el fin de semana, sintiéndose más desanimados a cada paso. Mientras
Jesús escuchaba en silencio, con desesperación anhelaba revelarse a sí mismo a sus abatidos amigos.
Pero el Señor deliberadamente ocultó su verdadera identidad porque ellos necesitaban ahora, más que
nunca, entender las Escrituras. Si Cristo hubiera permitido a estos dos fieles seguidores reconocer quién era él,
se habrían sentido demasiado excitados para escuchar las importantes verdades que él debía compartirles.
Aún después de tres años y medio de escuchar sus enseñanzas y predicación, todavía no entendían la
naturaleza de su misión. El les había dicho claramente: “El Hijo del hombre será entregado en manos de hombres,
y lo matarán; pero, después de muerto, resucitará al tercer día. Pero ellos no entendían esta palabra, y tenían
miedo de preguntarle.” (Marcos 9:31, 32).
Así que Jesús gentilmente interrumpió su triste conversación y por las siguientes dos horas les dio las
llaves para la comprensión de toda la Escritura y la profecía.
El estudio
Complete los espacios en blanco después de leer cada texto bíblico.
1. ¿Cuánto de la Escritura se nos ordena creer?
Lucas 24:25 “Entonces él les dijo: «¡Insensatos y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas
han dicho!»”
2ª Timoteo 3:16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para
corregir, para instruir en justicia”
NOTA: Los oráculos (verdades sagradas) completos de Dios están contenidos en los escritos del Antiguo y Nuevo
Testamentos. Las llaves para entender las profecías de Apocalipsis, se encuentran principalmente en las historias del Antiguo
Testamento. Por ejemplo, de los 404 versículos contenidos en el Apocalipsis, 278 de ellos son eco de otras historias y
profecías en el Antiguo Testamento.
2. ¿A quién dijo Jesús que revelan las Escrituras y las profecías?
Lucas 24:27 “Y comenzando desde Moisés y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas
las Escrituras lo que de él decían.”
Juan 5:39 “Escudriñad las Escrituras, porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna, y
ellas son las que dan testimonio de mí”
Apocalipsis 1:1 “La revelación de Jesucristo, que Dios le dio para manifestar a sus siervos las cosas
que deben suceder pronto. La declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan”
2. Regresando a Jerusalén 8 Seminario Profético
NOTA: La figura central en toda la Escritura y la profecía es Jesús. Esta cautivante serie cubrirá muchos temas de profecía,
pero tenga presente que el enfoque primario de Daniel y Apocalipsis es Jesucristo y su reino.
3. ¿Qué otro nombre es usado en la Biblia para referirse a Jesús?
Juan 1:1 “En el principio era el Verbo, el Verbo estaba con Dios y el Verbo era Dios.”
Juan 1:14 “Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros lleno de gracia y de verdad; y vimos su
gloria, gloria como del unigénito del Padre.”
NOTA: Dios ha expresado su voluntad divina y su propósito mediante la creación y mediante la revelación en su Palabra.
Ahora (Juan 1: 14) lo ha hecho mediante la encarnación, que es su revelación suprema y perfecta. Las Escrituras del Antiguo
Testamento centran su atención en Cristo, el Mesías, quien vendría para revelar el carácter, la mente y la voluntad del Padre
(así como un discurso es la expresión de ideas) más perfecta y completamente que las palabras.
4. ¿Qué clase de gente utilizó Dios para escribir la Biblia?
2ª Pedro 1:21 “...porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres
de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.”
5. En la historia con la cual introdujimos el tema, ¿cómo fue conocido Jesús por sus discípulos?
Lucas 24:35 “Entonces ellos contaron las cosas que les habían acontecido en el camino, y cómo lo
habían reconocido al partir el pan.”
NOTA: En la Biblia, el pan es un símbolo de la Palabra de Dios. Jesús dijo: “Escrito está: «No solo de pan vivirá el hombre, sino
de toda palabra que sale de la boca de Dios.» (Mateo 4:4). Como vimos, el tema central de la Biblia es Jesús. Como los
discípulos de la historia, al partir el pan de la Palabra de Dios (al leer, asimilar, y seguir las Escrituras) conoceremos a Jesús
y encontraremos gozo, paz y vida eterna. “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a
Jesucristo, a quien has enviado.” (Juan 17:3).
6. ¿Cuán importante debiera ser el estudio de la Biblia para el cristiano?
Job 23:12 “Nunca me separé del mandamiento de sus labios, sino que guardé las palabras de su boca
más que mi comida.”
Salmos 119:105 “Lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino.”
NOTA: El diablo odia la Biblia y hará cualquier cosa para prevenir que la gente la lea. El sabe que las profecías exponen sus
planes para engañar la raza humana. Así que no se sorprenda si Satanás intenta distraerle de esta serie de lecciones o trata
de mantenerlo ocupado con otras cosas. Dios abrirá un camino para que aquellos que buscan conocer la verdad la
encuentren.
7. De acuerdo con las palabras de Jesús, ¿por qué el estudio de la Biblia es tan importante?
Juan 14:6 “Jesús le dijo: «Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.»”
Juan 17:17 “Santifícalos en tu verdad: tu palabra es verdad.”
NOTA: Encontramos la verdad en la Palabra de Dios: la Biblia. La verdad es una mercancía escasa en el mundo hoy, y como
resultado de esto toda la gente en el mundo sufre. La verdad sobre todo lo que es realmente importante se encuentra en las
Escrituras. Estudiar y seguir sus consejos hace que el hombre sea libre (Juan 8:32) y le trae felicidad y vida abundante (Juan
15:11).
8. ¿Quién nos ayuda a entender la Biblia?
Juan 14.26 “Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os
enseñará todas las cosas y os recordará todo lo que yo os he dicho.”
Juan 16:13 “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad, porque no hablará
por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oiga y os hará saber las cosas que habrán de venir.”
1ª Corintios 2:13 “De estas cosas hablamos, no con palabras enseñadas por la sabiduría humana, sino
con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.”
9. ¿Qué debo hacer para asegurarme de que el Espíritu Santo está guiando mi estudio de la Biblia?
Lucas 11:9, 13 “Por eso os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá... Pues
si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre
celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”
Juan 7:17 “El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios o si yo hablo por
Seminario Profético 9 2. Regresando a Jerusalén
mi propia cuenta.”
NOTA: Parte de la obra del Espíritu Santo es ayudarnos a entender la verdad de las Escrituras. Es por eso que siempre
debemos pedir que el Espíritu Santo nos guíe antes de abrir el libro de Dios. Yo puedo tener la certeza de que el Espíritu Santo
está guiando mi estudio bíblico si: 1) le pido que me guíe, y 2) si estoy dispuesto a aceptar y seguir la verdad como él me la
revela.
10.¿Cómo nos ayuda la oración en el estudio de la Palabra de Dios?
Jeremías 33:3 “Clama a mí y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no
conoces.”
Santiago 1:5 “Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente
y sin reproche, y le será dada.”
11. ¿Qué método recomendado por las Escrituras debe usarse en el estudio de la Biblia?
Isaías 28:10 “Porque mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón,
línea tras línea, un poquito aquí, un poquito allá”
1ª Corintios 2:13 “De estas cosas hablamos, no con palabras enseñadas por la sabiduría humana, sino
con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.”
2ª Pedro 1:20 “Pero ante todo entended que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación
privada”
NOTA: Debemos poner a un lado nuestras propias ideas y estudiar la Biblia leyendo cada cosa en las Escrituras o en un
cierto tema (“un poquito aquí, un poquito allá”) y comparar todos los versículos sobre el tema. Debemos dejar que la Biblia
hable por sí misma, que sea su propio intérprete. Cuando se hace esto, la verdad siempre surge claramente. Así fue como
Jesús convenció a los dos discípulos en el camino a Emaús de que él era en verdad el Mesías (Lucas 24:27).
12.¿Qué hará el estudio de las Escrituras por nosotros?
2ª Timoteo 3:15 “y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer
sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.”
Salmos 119:11 “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.”
Romanos 15:4 “Las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de
que, por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza.”
NOTA: Las Escrituras nos ayudan a comprender el gran plan de salvación de Dios, la información más importante y valiosa
que ha sido dada al ser humano, apartándonos del pecado y llenando nuestra existencia de sentido y esperanza.
13.¿Qué advertencias referentes al estudio de la Biblia dan las Escrituras?
2ª Timoteo 2:15 “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué
avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.”
2ª Pedro 3:16 “en casi todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay
algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen (como también las otras
Escrituras) para su propia perdición.”
NOTA: “Que usa bien la palabra de verdad” significa interpretarla correcta y sinceramente. Hay un gran peligro en torcer las
Escrituras para hacerlas decir lo que queremos que digan. Lo que yo diga acerca de la Biblia importa poco. Lo que cuenta es
lo que la Escritura dice de sí misma.
14.¿Cómo deberíamos probar todas las doctrinas y enseñanzas?
Hechos 17:11 “Estos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra
con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.”
Isaías 8:20 “¡A la ley y al testimonio! Si no dicen conforme a esto, es porque no les ha amanecido.”
NOTA: Todas las enseñanzas religiosas debieran ser comprobadas por la Biblia. Si alguna enseñanza no está claramente de
acuerdo con las Escrituras es falsa y debería ser abandonada.
15.¿Qué ocurrió cuando Jesús explicó las Escrituras a sus dos discípulos desanimados en el camino a
Emaús?
Lucas 24:32 “Y se decían el uno al otro: «¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba
en el camino y cuando nos abría las Escrituras?»”
2. Regresando a Jerusalén 10 Seminario Profético
16.Después de que estos dos discípulos supieron que Jesús estaba vivo y le oyeron explicar las profecías,
¿qué hicieron?
Lucas 24:33 “Levantándose en esa misma hora, volvieron a Jerusalén; y hallaron a los once reunidos
y a los que estaban con ellos”
NOTA: Unas de las primeras reacciones que tuvieron estos discípulos después de escuchar a Jesús explicar las Escrituras
fue el ardiente deseo de compartir las buenas nuevas con otros. Esperamos que este también sea su deseo; invite a sus
amigos a que se le unan en esta serie dinámica de estudios proféticos.
Reflexión
¿Desea usted comprender plenamente y seguir las Escrituras?
Suplemento
Esta sección provee información adicional para un mayor estudio
A continuación hay una lista de términos claves que tienen un significado simbólico en la profecía bíblica.
Cada símbolo está en letras más oscuras y es seguido por su significado literal correspondiente y los versículos
bíblicos donde hallamos cada uno de estos significados.
Ángel: mensajero (Daniel 8:16; 9:21; Lucas 1:19, 26; Hebreos 1:14)
Babilonia: apostasía religiosa/confusión (Génesis 10:8-10; 11:6-9; Apocalipsis 18:2, 3; 17:1-5)
Bestia: reino, gobierno, poder político (Daniel 7:17, 23)
Pan: la Palabra de Dios (Juan 6:35, 51, 52, 63)
Día: año literal (Ezequiel 4:6; Números 14:34)
Dragón: Satanás o sus agentes (Isaías 27:1; 30:6; Salmos 74:13, 14; Apocalipsis 12:7-9; Ezequiel 29:3;
Jeremías 51:34)
Frente: mente (Romanos 7:25; Ezequiel 51:34)
Mano: trabajo (Eclesiastés 9:10)
Ramera: iglesia o religión apóstata (Isaías 1:21-27; Jeremías 3:1-3, 6-9)
Cabezas: poderes superiores, gobernantes, gobiernos (Apocalipsis 17:3, 9, 10)
Cuerno: rey o reino (Daniel 7:24; Apocalipsis 17:12)
Cordero: Jesús/sacrificio (Juan 1:29; 1ª Corintios 5:7)
Lámpara: la Palabra de Dios (Salmos 119:105)
Marca: señal o sello de aprobación o desaprobación (Ezequiel 9:4; Apocalipsis 13:17; 14:9-11; 7:2, 3)
Montes: poderes político-religiosos (Isaías 2:2, 3; Jeremías 17:3; 31:23; 51:24,25; Ezequiel 17:22, 23;
Daniel 2:35, 44, 45)
Aceite: Espíritu Santo (Zacarías 4:2-6; Apocalipsis 4:5)
Rojo: pecado/corrupción (Isaías 1:18; Nahum 2:3; Apocalipsis 17:1-4)
Roca: Jesús/verdad (1ª Corintios 10:4; Isaías 8:13, 14; Romanos 9:33; Mateo 7:24)
Sello: Señal o sello de aprobación o desaprobación (Romanos 4:11; Apocalipsis 7:2, 3)
Serpiente: Satanás (Apocalipsis 12:9; 20:2)
Estrellas: ángeles/mensajeros (Apocalipsis 1:16, 20; 12:4, 7-9; Job 38:7)
Sol: Jesús/el Evangelio (Salmos 84:11; Malaquías 4:2; Mateo 17:2; Juan 8:12; 9:5)
Espada: la Palabra de Dios (Efesios 6:17; Hebreos 4:12)
Ladrón: súbito regreso de Jesús (1ª Tesalonicenses 5:2-4; 2ª Pedro 3:10)
Tiempo: año literal (Daniel 4:16, 23, 25, 27; 7:25; Daniel 11:13)
Aguas: lugares habitados/gentes, naciones (Apocalipsis 17:15)
Mantos blancos: victoria/justicia (Apocalipsis 19:8; 3:5; 7:14)
Vientos: conflictos/conmoción/”vientos de guerra” (Jeremías 25:31-33; 49:36, 37; Jeremías 4:11-13; Zacarías
7:14)
Mujer pura: iglesia verdadera (Jeremías 6:2; 2ª Corintios 11:2; Efesios 5:23-27)
Mujer corrupta: iglesia apóstata (Ezequiel 16:15-58; 23:2-21; Oseas 2:5; 3:1; Apocalipsis 14:4)